TELEPAÍS – 1989

No pocos se ofenderán al saberse incluidos, pero la tercera edad comienza oficialmente a los 60 años, y fue para los que sobrepasan esta barrera física y psicológica para quienes TVE realizó en 1989 un programa de televisión que se llamó El tiempo que vivimos, y que dirigió y presentó Inma de Santis.

Uno no siempre trabaja en lo que quiere, a veces tiene que hacerlo en lo que puede. En esta entrevista de marzo de 1989 firmada por Carlos Herrán en TELEPAÍS, suplemento de EL PAÍS, Inma reconoce que ya se sentía algo cansada de su anterior programa, Fin de Semana, y que había mostrado a la dirección de TVE un proyecto para otro espacio sobre su terreno, sobre "lo mío", que naturalmente era el séptimo arte. Pero no hubo cabida en ese momento.

En su día no lo llegué a ver. Ahora tengo algunos capítulos grabados y, retrospectivamente, he de confesar que El tiempo que vivimos no me gusta. He bromeado alguna vez diciendo que, si estuviera en un asilo, interrogaría indignado a la enfermera sobre "por qué me ponéis este programa con señores de 90 años haciendo gimnasia con un balón de playa", y exigiría a voces el canal Eurosport o un DVD de La Guerra de las Galaxias, Terminator, o cualquier buena película que me hiciese feliz y me recordase los buenos tiempos. Claro que Inma y las personas que trabajaron para sacar esto adelante lo hicieron con la mejor intención, y me consta que a mucha gente sí le gustó.

En una premonición fatídica, el artículo de TELEPAÍS detalla cómo Inma canceló un viaje en todoterreno al Sahara para hacerse cargo de El tiempo que vivimos, aunque ahora sabemos que no lo canceló... Sólo lo aplazó.

"No me gusta nada de lo que hago. Nunca. Soy mi peor crítico. Me fustigo constantemente. Y quiero que la gente que trabaja conmigo se implique en igual medida. No busco la perfección, pero no me conformo con chapuzas. Y si hay que repetir un programa porque está mal, pues se repite".

"La felicidad es un momento. Media hora de felicidad sería el éxtasis".