Mañana es 21 de diciembre...

Inma de Santis y Ornella Muti, 1972

Esta semana que tan ligada ha estado al cine, con un estreno de proporciones globales como ha sido Avatar, precede al aniversario de la muerte de la actriz española Inma de Santis. Mañana lunes se cumplen 20 años y obviamente me gustaría mucho que se emitiese alguna nota de recuerdo en la prensa o la televisión. Así mismo, espero que las gestiones para que se le conceda alguna calle en Madrid lleguen a buen término en 2010. Aprovecho para, una vez más, agradecer a la madre de Inma y a A. H. su generosidad. Me han proporcionado y me proporcionan valiosa información, pequeñas y grandes anécdotas sobre la carrera de Inma y por supuesto un torrente de material audiovisual, decenas de vídeos y fotografías con los que he podido hacer este espacio en Internet del que tan orgulloso estoy. Es un blog dedicado a una actriz a la que primero exalté por una debilidad tan humana como la contemplación de su belleza... una belleza, un encanto y una distinción de los que surgen una vez cada generación, pero también a una persona a la que con el paso del tiempo y un mejor conocimiento de su vida, admiro por facetas que se dicen más profundas.

Es curiosa la forma en la que los hechos se concatenan y unas cosas nos llevan a otras relativamente distintas. Nunca me ha interesado el cine español y programas como Estudio 1 y otros parecidos que Inma hizo para TVE, en los 70 y comienzos de los 80, me cogieron demasiado joven. Ella era una desconocida para mí. La había visto en una película, Juego de amor prohibido (1975), pero no sabía ni su nombre. Como ya he contado, fue mi culto al clásico de la ciencia ficción Blade Runner (1982) y a la joya del fantástico Conan the barbarian (1982) lo que me condujo hasta Inma un fin de semana —y nunca mejor dicho— de 1988, cuando programé mi vídeo para grabar el film de Ridley Scott en un pase en TVE. Al día siguiente, pulsé el play para ver la grabación y me encontré con Inma en su programa Fin de Semana, hablando de Arnold Schwarzenegger y Conan the barbarian, minutos antes de la proyección de Blade Runner. Desgraciadamente ya no poseo esa cinta. Hace unos años, durante una limpieza de los centenares de casetes VHS que tenía en casa, me deshice de ella... ¡Y bien que me he flagelado por ese error! Pese a que ahora ya he conseguido casi todos los capítulos de Fin de Semana (69 en total), aquel en el que tomé conciencia de Inma (con el estudio decorado al estilo del antiguo Egipto) no ha aparecido. ¡Jejeje! ¡Me está bien empleado!

¿Cómo sería Inma si viviera hoy? Tendría 50 años. Profesionalmente, no veo razón por la que con su dilatada experiencia, una vida en un entorno de cámaras, no hubiera podido cumplir su sueño de dirigir un largometraje. Ante las cámaras o tras las cámaras tendría la titularidad. De haber seguido en televisión, me agradaría verla retransmitiendo la ceremonia de entrega de los Oscar. Por sus introducciones en Fin de Semana, el programa que dirigió y presentó en 1987 y 1988, se infería que Inma tenía una buena cultura cinematográfica y que disfrutaba hablando de las estrellas y mitos de Hollywood. Respecto al físico, alguien comentó una vez que su muerte a los 30 años fue una desdicha, que tendría que haber tenido una larga vida, envejecido y engordado... envejecido sí, es inevitable, ¡pero engordado no! Inma, y esta es una teoría de la que estoy convencido, era mucho más presumida de lo que le gustaba reconocer. No se habría abandonado. Estableceré una analogía de lo más oportuna. En Experiencia prematrimonial (1972) y Leonor (1975), Inma trabajó con una de las actrices más deseadas de Europa y del mundo, la italiana Ornella Muti. Las inéditas fotografías que encabezan este artículo están tomadas durante el rodaje de Experiencia prematrimonial (film que al parecer no gustó especialmente a Inma), no estoy seguro de si en Madrid o en Santander, y en ellas se demuestra que la chica más guapa de Madrid no tenía nada que envidiar a la diva de Roma. El joven que posa con Inma en una de las fotos es Alessio Orano, novio de Muti, con la que se casaría en 1975 para divorciarse en 1981. Nótese que Ornella Muti nació en 1955 y es cuatro años mayor que Inma, aunque esos 54 años (foto septiembre 2009) no han tornado en común a una mujer que sigue siendo fuera de lo común. No olvido que en Experiencia prematrimonial trabajó Alberto Closas, que debió llevarse muy bien con Inma ya que ésta le realizó una cariñosa entrevista muchos años después, en 1989, para el programa El tiempo que vivimos. Tengo esta entrevista íntegra y la publicaré pronto en el blog.

Feliz 2010. Seguid el ejemplo de Inma (en la fotografía de abajo) y dadle a la bebida en Nochevieja. Como decía el genial Fernando Fernán Gómez, del que ya veremos el gato que le regaló a Inma, las personas que beben suelen estar más contentas.

De Inma de Santis II