Despidiendo el año 2014, en el vigésimo quinto aniversario de la muerte de Inma, me voy a los años 80, creo que a 1982, y a unas fotografías de Inma y su intrínseca belleza en plenitud, inextricable, durante un viaje a Brighton, Reino Unido. Además, en la misma época y en su faceta artística, un artículo sobre la obra teatral Del rey Ordás y su infamia, estrenada en 1983 y dirigida por Fernando Fernán Gómez, con Inma como la sufrida Delgadina, objeto de la pasión desatada del incestuoso rey Ordás. Inma explica cómo por negarse a acostarse con su progenitor es encerrada en una torre.
Es un placer recordar a Inma en esta fructífera despedida del año en la que, al regalo de viejos programas publicados en la web de TVE, como por ejemplo La balada del rey Gaspar (1968), debemos sumar el tesoro del libro de Roberto Hoya.
¡Feliz 2015 y viva Inma!






